Si lo haces simple, mejor.
A algunas personas les da miedo, pero se puede pensar y expresarse de
forma simple.
Simplificar es un elemento multiplicador del rendimiento. Se pueden
conseguir resultados sin simplificar, pero hacerlo los incrementa.
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¿Necesita el mundo 31
variedades de champú
Head & Shoulders?
La dirección de compañía
identificó el problema real:
«Resulta incomprensible hasta
qué punto se lo hemos puesto difícil a los consumidores con el paso de los
años».
Después de décadas de sacar lo
«nuevo y mejorado» y lo «con frescor a limón», y lo «tamaño extra», la
multinacional Procter y Gamble se dio cuenta de que vendía demasiados tipos de
cosas.
La solución a ese
problema era simple, aunque la implementación era un proceso complejo.
Estandarizaron las fórmulas de
los productos, redujeron las ofertas y las promociones complicadas.
Desaparecieron 27 tipos de
promociones, incluyendo los paquetes bonus y las tácticas extravagantes.
También se deshicieron de las
marcas marginales, redujeron líneas de productos y limitaron los lanzamientos
de nuevos productos.
¿Qué pasó?
Sencillamente había menos
cosas para vender.
¿Las ventas disminuyeron?
¡No!
Sólo en productos para el
cabello, al reducir drásticamente el número a la mitad, aumentaron su cuota de
mercado en cinco puntos.
Desde luego, nuestros amigos
de Procter y Gamble no tuvieron miedo a la simplicidad, muy al contrario la
utilizaron para aumentar su negocio en
un tercio.
Este es «El Poder de lo
Simple».
No te pierdas al final del post dos ejemplos más del poder
de lo simple:
Chupa Chups ¿Te suena? Talgo ¿Conoces los trenes Talgo?
Simplificar no es
fácil, hay demasiados factores y costumbres que suponen un inconveniente para
hacerlo. Sin embargo es eficaz y los beneficios de simplificar compensan: es
El Poder de lo Simple
… … … … …
La última
variable de la casa de la eficacia de Pablo Maella es
“Simplificación”
Hazlo simple y serás más eficaz.
La casa de la eficacia de Pablo Maella.
No cabe
duda de que simplificar multiplica el
rendimiento. En términos de eficacia no hay motivo para hacer las cosas
complejas, cuando se pueden hacer simples.
Para
explicar el porqué de las cosas complejas recurrimos al psicólogo John Collard,
del Instituto de Relaciones Humanas de la Universidad de Yale, quien interpreta
que no ser simple, o no buscar soluciones sencillas, es consecuencia del temor a pensar:
«No sólo
cuesta trabajo pensar, sino que muchas personas temen hacerlo. Son dóciles y
obedientes y siguen fácilmente las sugerencias de los demás, porque les ahorra
el trabajo de pensar por sí mismas. Se vuelven dependientes de otros para el
trabajo mental y buscan un protector cuando tienen dificultades».
Probablemente
tienen razón, hay un rechazo creciente a la complejidad. La gente no quiere pensar.
Por eso, lo
«simple» y «sencillo» tiene tanta importancia. Al sobre-simplificar un asunto
complejo, se puede hacer que la gente entienda y pueda formar su propia opinión
sin esforzarse demasiado.
Las ideas
simples tienden a ser obvias porque tienen un toque de realidad. Pero la gente
no se fía de sus instintos. Piensa que siempre hay una respuesta oculta más
compleja.
Es un error.
Lo que es obvio para ti es obvio para muchos. Por eso,
en los negocios una solución obvia suele funcionar muy bien en el mercado.
La complejidad no debe admirarse. Debe Evitarse
Ø Lo simple es más eficaz porque
empleamos menos recursos.
Ø Lo simple es más rápido, las cosas
simples se pueden hacer más deprisa.
Ø Lo simple es más fiable, al hacer
cosas simples se cometen menos errores y tienes menos posibilidades de fallar.
Con todo y aunque
la simplicidad sea de total sentido común,
vivimos en un mundo profesional complejo:
·
La evolución natural de las cosas es hacia su complejidad.
·
Las cosas se hacen cada vez más complicadas, en lugar de eliminar añadimos
a lo ya existente.
·
Las ideas y los procesos evolucionan con el tiempo para ser más
complicados.
·
Socialmente se admira la complejidad y se desprecia la simplicidad.
·
En entornos laborales la sencillez
no está bien vista por el miedo a ser simples, lo que normalmente nos lleva
a complicar las cosas para que parezca
que hacemos algo relevante.
·
Cuando nos acostumbramos a lo complejo lo acabamos viendo normal.
·
Hay personas a las que les puede interesar complicar las cosas, ya que si
lo que hacen es simple, es posible que su labor no sea “imprescindible”.
·
Como dice la escritora de discursos norteamericana Peggy Noonan: «Complique los problemas y se saldrá
siempre con la suya».
Para ser
eficaces en este mundo cada vez más complejo, es necesario simplificar.
Ø Si no haces
nada por simplificar las cosas van a evolucionar hacia la complejidad.
Ø Si no
simplificas: complicas. No hay término medio.
Si quieres ser eficaz y mantener tu buen nivel profesional busca de manera permanente la simplicidad. Sigue
estos consejos:
Ø Decide clara y abiertamente simplificar.
Ø Identifica lo que se puede simplificar y hazlo.
Ø Pon en cuestión
lo que haces y como lo haces.
Ø Lo que no tenga
justificación elimínalo:
Eliminar es la forma más efectiva de simplificar.
Ø Prioriza y céntrate en lo importante.
Ø Confía en tu sentido común, te dirá
lo que tienes que hacer.
Ø Escucha más y mejor y responde siempre de
forma breve y directa.
Ø Las grandes
ideas casi siempre se expresan con palabras simples.
Y ahora te
planteo una pregunta:
¿Puedes
hacer lo que estás haciendo de manera más sencilla?
Estamos tan
acostumbrados a hacer las cosas como las venimos haciendo que no nos planteamos
que se puedan hacer mejor de otra manera:
Hazlo simple y algo
bueno ocurrirá.
Al final
del artículo y como complemento a la anécdota de Procter y Gamble del principio
te incluyo dos ejemplos reales del poder de lo simple de dos empresas que
seguro que te son familiares:
Chupa Chups ¿Te suena?
Talgo ¿Conoces
los trenes Talgo?
¡Muchas Gracias por tus cinco
minutos!
Benicio Orozco
No te
pierdas el corolario final de esta serie de artículos. Si tienes unminuto mas
sigue hasta abajo y disfrútalo.
Reflexión
“La falta de sencillez lo estropea todo”
Miguel de Unamuno, Escrito y filósofo
Español de la generación del 98
La frase
"Si no tienes una idea buena, simple y
diferenciadora, más vale que tenga un precio excelente".
Jack
Trout, es el experto en estrategia competitiva más reconocido en todo el mundo.
¿Cuántas
veces te has complicado la vida por no simplificar desde el origen?
¿Puedes
hacer lo que estás haciendo de manera más sencilla?
Tu turno:
Escríbelo abajo en comentarios.
¡¡ Muchas Gracias !!
COROLARIO A LA SERIE DE ARTICULOS
“HACER BIEN TU
TRABAJO NO ES SUFICIENTE”
En esta serie de artículos he hablado de los seis factores de la eficacia:
RESPONSABLIDAD, CAPACIDAD, AUTOMOTIVACION, AUTOGESTION,
SUERTE Y SIMPLIFICACION.
Los hemos visto desde el sentido común, con la
visión que me aporta mi propia experiencia y analizado con la perspectiva y el objetivo de poder llega a ser un EXCELENTE VENDEDOR:
primero eficaz, después eficiente y finalmente efectivo.
Han sido un total de 9 artículos publicados, 14.000
palabras, 70 minutos de lectura,
interesantes recomendaciones y consejos prácticos y concretos
Ahora
es tu turno:
Considera las recomendaciones y aplica los consejos.
¡¡¡ Seguro que te irá mucho mejor !!!
Recuerda
que en un partido de futbol
EL EQUIPO MÁS EFICAZ ES EL QUE GANA.
No
el que juega mejor, ni el más rápido o el que hace las mejores jugadas.
De
igual manera, en el departamento comercial y de ventas
UN VENDEDOR EFICAZ ES EL QUE VENDE.
No
el que hace todo lo posible por conseguirlo.
Y ES MÁS EFICAZ CUANTO MÁS VENDE.
No olvides recomendarlo a tus colegas y amigos y no dudes en preguntarme cualquier duda. Seguimos en contacto . Te espero abajo en los comentarios.
No te pierdas los
dos casos reales del poder delo simple las historias de CHUPA CHUPS y TALGO. Sigue leyendo
¡Muchas
Gracias de nuevo por tu minuto extra!
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"La Mirada Critica"
de Benicio Orozco
Fuentes: La anécdota de
Procter y Gamble esta extraída de la Revista Business week (edición 9 de septiembre de 1996)
“Los siete
hábitos de la gente altamente efectiva”.
Stephen Covey
“Organízate con eficacia” David Allen
“Motivación o Automotivación” Miguel Angel Velázquez Martín .
Director del centro de investigación en valores http://mavelazquez.blogspot.com.es/
“Las ocho claves del liderazgo del monje que vendió su
Ferrari” Robin S. Sharma
“El poder de lo simple”
Jack Trout
Anexo
Dos ejemplos reales de “El poder de lo simple”:
Chupa Chups
Desde que a
Enric Bernat se le ocurrió pinchar un caramelo con un tenedor para comerlo sin
ensuciarse las manos, han pasado muchas cosas.
Lo más
importante es que su aventura empresarial ha cumplido más de 50 años y parece
tener, sin duda, una larga vida por delante. Para desarrollar
su idea, Bernat
adquirió en 1957
una pequeña empresa,
Granja Asturiana S.A. y cambió, claro está, el tenedor por un palito de
madera, que ahora ya es de plástico.
Con esta idea tan simple y una mentalidad
práctica salió adelante la que hoy ya se llama como el producto que la ha hecho
famosa, Chupa Chups S.A. Con filiales en Francia (1970), Japón (1977) EE.UU.
(1980), Alemania (1982), Rusia (1989), China (1994), México (1996), India
(1999) y Brasil (2000). Chupa Chups está presente en 164 países y produce 4.000
millones de caramelos al año. Se calcula que a fecha de hoy se han vendido más
de 60.000 millones de Chupa Chups.
En 2006 el
empresario aceptó una oferta de venta por valor de más de 400 millones de Euros
de su actual dueño, la italiana Perfetti Van Melle.
El
producto, aunque muy simple, está tan afianzado, que por ejemplo, 9 de cada 10
niños norteamericanos, alemanes, rusos o chinos responden «Chupa Chups» cuando
se les pregunta por un caramelo con palo. Y desde que en 1996 se ha creado un
club de golosos, se han incorporado casi 100.000 miembros que consumen estos
caramelos, desde Argentina hasta Qatar.
La receta
del señor Bernat para
el desarrollo empresarial
es: «Lo fundamental
es disponer de un producto diferenciado, con unas características
propias que lo distingan de sus competidores y que satisfaga alguna
necesidad del consumidor.
El primer paso
para ese producto
es convertirse en líder
de su
mercado local, de
forma que sea
un éxito fácilmente exportable. Luego
sólo debe adaptarse
a las circunstancias de
cada país y
cada mercado»
El poder de lo simple...
Trenes Talgo
El diario
de negocios español Cinco Días publicaba en junio del 98 un artículo en el que informaba que la empresa
Talgo presentaba una aplicación de su invento para el cambio de ancho de vía a
los trenes de mercancías.
Uno de los subtítulos era El éxito siempre está en lo más sencillo.
El nuevo sistema se
destaca por lo simple; evita el costoso y lento cambio de «bogies» y permite
que, en sólo 5-7 segundos el vagón que entra con un ancho salga con otro.
La
tecnología Talgo se inició en octubre de 1942, por el ingeniero español
Alejandro Goicoechea, inventor de un original y muy simple sistema de guiado de
los ejes de vehículos ferroviarios. Una vez probado con éxito, José Luis de
Oriol financió su desarrollo industrial y creó la empresa Patentes Talgo, S.A.
Hoy, además de ser el tren más
conocido y valorado
por los viajeros
españoles, circula en
EE.UU., Francia, Alemania,
Suiza, Portugal e Italia; y compite por relación calidad/precio con los más
modernos trenes de alta velocidad. En 1997, ha sido el tren mejor calificado
por los usuarios norteamericanos y en Europa, sus índices de satisfacción
superan el 90 por 100.
Según los
fundadores, «seguridad» y «sencillez»
son los dos conceptos básicos de los trenes Talgo. «Todo lo que es susceptible
de avería, antes o después se estropea; para lo que no hay mejor solución que
reducir al mínimo el riesgo, diseñando
con sencillez», suelen decir. El tren «Talgo Pendular» se basa en dos ideas
simples: ejes guiados con ruedas independientes y elevación del plano de
sustentación por encima del centro de gravedad de las cajas. Con ello se puede
aumentar la velocidad con el máximo confort y seguridad para el pasajero; y con
mayor aprovechamiento energético. Al primer desarrollo le han seguido muchos
otros, que han servido de modelo para los diseños más avanzados de trenes de
alta velocidad. En todos, la simplicidad
y el ingenio han sido la base de una gran marca española cuyo éxito es el
resultado de buscar la economía en la operación y el mantenimiento de sus
sencillos y eficaces trenes con alto grado de fiabilidad. Las compañías que los
explotan, y los viajeros que los usan, tal vez no lo han descubierto; pero
Talgo es el resultado de esa mentalidad
ingeniosa y sencilla de sus fundadores.
El poder de lo simple...