Todos atravesamos por malos momentos en el trabajo. Momentos en los que
parece que todo lo que hacemos carece de sentido. Es entonces cuando debes ser
tenaz, permanecer en la tarea, no desanimarte cuando algo no salga bien, no
caer en el desaliento y ordenar tus emociones al servicio de un objetivo
esencial.
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Anécdota de la ranita sorda.
Un grupo de ranas viajaba por el
bosque y, de repente, dos de ellas cayeron en un hoyo profundo.
Todas las demás ranas se reunieron
alrededor del hoyo.
Cuando vieron cuán hondo era el hoyo, le dijeron a las dos ranas en el fondo
que para efectos prácticos, se debían dar por muertas.
Las dos ranas no hicieron caso a los comentarios de sus amigas y siguieron tratando de saltar fuera del hoyo con todas sus fuerzas.
Las otras ranas seguían insistiendo
que sus esfuerzos serían inútiles.
Finalmente, una de las ranas puso
atención a lo que las demás decían y se rindió. Se desplomó y murió.
La otra rana continuó saltando tan fuerte como
le era posible.
Una vez más, la multitud de ranas le gritó que dejara de sufrir y simplemente se dispusiera a morir. Pero la rana saltó cada vez con más fuerza hasta que finalmente salió del hoyo.
Cuando salió, las otras ranas le
preguntaron:
- ¿No escuchaste lo que te decíamos?
La rana les explicó que era sorda.
Ella pensó que las demás la estaban animando a esforzarse más para salir del
hoyo.
La rana sorda, se automotivaba. Daba
igual lo que dijeran las demás ranas, no las podía oír.
Orientaba su esfuerzo
con toda su energía hacia conseguir el objetivo.
… … … … …
Una rana perdió la
motivación, la otra no dejo de automotivarse
Abordamos hoy la sexta
entrega de la serie “Hacer bien tu trabajo no es
suficiente…”
No te pierdas los artículos
anteriores:
Hacer bien tu trabajo no es suficiente 1 Primero EFICACIA después
EFICIENCIA..html
Hacer bien tu trabajo no es suficiente 2 RESPONSABILIDAD.html
Hacer-bien-tu-trabajo-no-es-suficiente 3 CAPACIDAD.html
Hacer bien tu trabajo no es suficiente 4 Sin TALENTO
eres prescindible .html
Hacer bien tu trabajo no es suficiente 5 AUTOMOTIVACION ESFUERZO Y
ENTUSIASMO.html
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Al igual que en el caso de las dos ranas, a los profesionales nos sucede lo mismo con la motivación y la desmotivación.
Hay que reconocer que automotivarse en el trabajo no siempre es tarea fácil.
La motivación de las personas en el trabajo depende:
· De aspectos externos como las condiciones laborales, el estilo de
dirección, el entorno laboral, los compañeros.
·
Pero sobre todo de aspectos internos: de la propia disposición a automotivarse.
Aspectos externos
de la motivación (y desmotivación).
Hay empresas
que hacen esfuerzos por motivar a sus empleados con el objetivo de tener un
equipo motivado y conseguir que la
Empresa funcione adecuadamente tanto en la consecución de resultados como en la
dinámica interna que conduce a ellos. Las personas motivadas elevan su nivel de
compromiso, responsabilidad y dedicación al trabajo lo cual incrementa los
logros y los beneficios para la empresa y el profesional.
Un profesional motivado trabaja con
rigor, es productivo, no requiere ningún control y está satisfecho con su
tarea. Al contrario, cuando el empleado entra en la espiral de la
desmotivación, toda su carrera se resiente, empeora su eficacia, sus resultados
y la empresa se resiente. Algo de responsabilidad tienen en esto los jefes.
Los líderes, jefes, directivos de las empresas son los que abren
posibilidades, los que generan la ilusión realista en sus colaboradores, los
que crean el espacio para que el propio colaborador se pueda automotivar. Eso
exige del líder fórmulas de gestión diferentes, creativas, innovadoras, que las
empresas punteras ya están
experimentando, quizás por eso son
punteras y líderes. Recordemos que las empresas líderes son las que mejores
resultados obtienen, en las que más a gusto se trabaja y las que mejores
resultados y mayores beneficios obtienen.
Por el
contrario
Un profesional desmotivado reduce la productividad hasta un 50%, aumenta el absentismo y la
rotación laboral. La desmotivación produce frustración e insatisfacción, que a
su vez provocan problemas laborales, sociales y de salud.
La
remuneración o salario, estatus, seguridad, dirección, relaciones humanas,
política, normas, procedimientos de gestión de la empresa, relación con los
superiores y condiciones del trabajo son
normalmente causa de insatisfacción.
Cuando
percibimos que somos tratados con poca atención y justicia por la empresa,
desarrollamos sentimientos de insatisfacción en el trabajo.
Los agravios
comparativos con otros compañeros, la falta de reconocimiento, la privación de
participación, el rechazo continuo de nuestras ideas, la desinformación, la
desconfianza, la incongruencia de los objetivos y un trabajo aburrido, monótono
e irrelevante desencadenan el proceso de desmotivación que
se desarrolla en las siguientes fases:
· Primero, la confusión o incredulidad.
Fruto de la discordancia entre lo que consideremos que son nuestras funciones
en el trabajo y lo que realmente estamos realizando.
· Segundo, la indignación. Una vez que
nuestro superior rechaza continuamente nuestras ideas y se inmiscuye en nuestro
ámbito de decisión y actuación.
· Tercero, la esperanza inconsciente. Pensamos
que se pueden alcanzar los objetivos a pesar de las incongruencias de nuestro jefe.
En esta fase anhelamos situaciones o empleos anteriores. Echamos de menos
tiempos mejores.
· Cuarto, la depresión. Una vez que el
conflicto con nuestro superior ya es abierto, y amenaza también la relación con
el cliente. El orgullo y la satisfacción
laboral están heridos de muerte. Ante esta situación, se suele adoptar una
actitud pasiva, desarrollando el trabajo sin energía, con desilusión, desgana y
apatía.
· Quinto, la falta de cooperación. Desaparecen la
iniciativa, el ímpetu, la autonomía, entramos en una fase en la que queremos
redefinir nuestro trabajo, nos negamos a cooperar más allá de lo estrictamente
imprescindible: “eso no es de mi competencia”, “yo no me encargo de eso”, “esa
no es mi responsabilidad”…
·
Por ultimo. La fase final. En la que el
individuo opta por dos soluciones:
·
§ Abandonar
la empresa o
§ Aceptar
el trabajo como una obligación que dura ocho horas y ni un solo minuto más.
… … … … …
¿Te son familiares las situaciones
de este proceso?
¿Cuántas veces las ha visto
o sufrido?
… … … … …
Aspectos internos
de la motivación ( o desmotivación).
No es fácil superar
la desmotivación que no da nada y sí que quita mucho. Pero lo importante es que
nosotros mismos somos los que gestionamos nuestra propia motivación.
Nosotros gestionamos nuestra
disposición a automotivarnos.
A partir de los deseos, que van más allá́ de las
necesidades, se abre el camino de la automotivación.
La verdadera motivación va de dentro hacia afuera y
es fruto de un profundo compromiso con uno mismo para alcanzar las metas que se
proponga.
La automotivación es el medio por el cual podemos
alcanzar el nivel de entusiasmo deseado para conseguir el máximo nivel de
eficacia profesional, conseguir nuestros mejores logros, objetivos y alcanzar
el éxito profesional.
Tienes
que seguir siendo un profesional, y sea cual sea el motivo que te ha llevado a
la desmotivación, tienes que luchar contra ella y lo que es más importante
puedes luchar contra ella, hay técnicas de automotivación que te van a ayudar a superar aquellos momentos en
los cuales todo lo que realizamos carece de sentido.
Aunque
reconozco que, como decía arriba no es fácil. A mí personalmente me funcionan y
te invito a que las utilices, no pretendo convencerte, al contrario veras como son
todas de sentido común.
¡Muchas Gracias por tus cinco
minutos!
Si te gusta lo
que has leído, sigue cinco minutos más…
¿Cómo
incrementar la automotivación?
Acepta la realidad y a los
demás tal y como son.
Te gustaría que las cosas fuesen de otra manera, que
todo sucediera de la forma que tú
consideras más justa, pero no es así: “Las cosas son como son”.
Para empezar a gestionar tu automotivación tienes que aceptar la realidad,
te guste o no, y debes basarte en como son las cosas y las personas y no en
como piensas que deberían ser. En lugar de exigir a las circunstancias y a los
demás que se amolden a tus deseos:
¡¡Acéptalos tal como son!!
Si no lo haces caerás en la decepción y la
desmotivación.
Nadie es pefecto, lo sabes, pues acéptalo. No significa
que estés de acuerdo pero, qué sentido tiene enfadarse con alguien por ser como
es, salvo la frustración. Tienes que ser indulgente, piensa que si las personas
tienen limitaciones no se les puede exigir que hagan todo bien. Conoce bien a
tus compañeros para saber lo que puedes esperar de ellos y lo que no y en vez
de centrarte en sus defectos, céntrate en lo que pueden aportar.
Tú eres el protagonista, no
la víctima.
Deja de considerarte víctima de las circunstancias y
pasa a ser protagonista de tu propia vida. Cambia tu forma de pensar y oriéntala
a considerarte el autor de tus acciones y el responsable de lograr tus
objetivos.
Afronta la vida con un actitud positiva.
Citaré a Churchill cuando decía: “un optimista ve
una oportunidad en toda calamidad y un pesimista ve una calamidad en toda
oportunidad”.
Acéptate
cómo eres
Eres humano, no eres perfecto, no cometas el error
de autoengañarte. Tú sabes que haces bien y cuáles son tus defectos. Aprovecha
tus fallos y tus errores para mejorar esos aspectos, todos aprendemos a base de
caer y levantarnos, corregir el error para no volver a caer.
Reconoce tus fallos, valora tus aciertos,
Acepta con naturalidad unos y otros y parte de ese
punto para conseguir tus objetivos. Un factor muy importante de la
automotivación es el aprendizaje constante, una vez que conoces tus carencias,
amplia tus conocimientos y desarrolla tu potencial.
Averigua
qué es lo que te desmotiva
Normalmente, no todo es negativo. Localiza los aspectos desmotivantes (un mal jefe, un
salario estancado… ) y los motivantes (un trabajo que te gusta…), ponlos en una
balanza y se objetivo en el análisis. Establece tus recompesas,
Valora lo que deseas y si es posible
conseguirlo en la empresa.
Es posible que puedas eliminar algún factor
negativo. Analiza la situación y si las ventajas superan a las dificultades, es
posible que no estés tan mal como creías, o es posible que si, en cualquier
caso tendrás un diagnóstico claro.
Se
proactivo y no reactivo.
La gente que quiere conseguir algo, lo logra. Lo que
sucede muy a menudo es que la gente no sabe lo que quiere conseguir, muy pocas
personas hacen ese ejercicio, la mayoría reaccionan ante las circunstancias. No permitas que los obstáculos en tu camino frenen
tu avance.
Actúa para conseguir tus objetivos, no
esperes que las cosas pasen.
La proactividad nos conduce a tomar la iniciativa de
hacer lo que resulte necesario y realizar la tarea. La proactividad genera
motivación, actuar siendo reactivo genera lo contrario. Sea lo que sea lo que
decidas hacer, hazlo ya.
Establece
objetivos, metas y logros relevantes
El desafío impulsa la automotivación. Cuando te
propones algo concreto, aprender windsurf o conseguir un cliente, tu
automotivación aumenta, pones ilusión y haces el esfuerzo por conseguirlo.
Cuando te propones un reto tiendes a estar motivado,
mientras que si no lo haces te acomodas y pierdes motivación. Las metas
motivadoras, deben suponer un reto y ser realistas, si te propones algo
imposible, jamás lo conseguirás y te desmotivarás. Metas relevantes, cuanto más
relevancia tenga más motivante será.
Para un jugador de futbol es más motivante ganar la liga que el partido del
domingo. La motivación para ganar el partido del domingo es ganar la liga.
Proponte metas retadoras y realistas, escríbelas
y ponle plazos.
Cuando las consigas renuévalas.
Escríbelas porque el mensaje escrito refuerza el
compromiso y además resulta muy motivador tachar los avances. La automotivación
es un proceso continuo, cuando alcances una meta, plantéate inmediatamente la
siguiente. Si no, corres el riesgo de quedar estancado.
Dale
sentido a todo lo que hagas
Recuerda
el picapedrero que construía catedrales picando piedra (lo puedes ver en este
enlace Hacer bien tu trabajo no es suficiente 5.html al post anterior)
Busca el significado último de lo que haces.
Cuando buscas la relevancia de tu trabajo, das mayor sentido a tu
actividad laboral y facilitas tu automotivación. Si ves tu empleo como un mal
irremediable carente de misión, trabajaras con el piloto automático puesto y
sin ninguna ilusión.
Se trata de encontrar el porqué de lo que haces y encontrar el motivo más
trascendente para hacerlo, esto hará que
te esfuerces más. Tu trabajo tendrá más sentido para ti si conoces la finalidad
última.
Ponle
ilusión
Somos humanos y tenemos días mejores y peores, no
todo es alegría y entusiasmo, a lo que hay que sumar que hay tareas dentro de
nuestra responsabilidad que nos gustan menos o nada.
El trabajo lo puedes hacer con ilusión o con
desgana, si lo haces con ilusión estarás más motivado. No se trata pues de hacer
solo lo que te gusta sino de conseguir poner toda la ilusión posible en todo lo
que haces.
Pon toda la ilusión posible en todo lo que
hagas
¿Qué hacer cuando no hay ilusión? La respuesta no es
difícil. Debemos esforzarnos por hacer de igual manera y con la misma
“responsabilidad” todas las tareas, esa es la clave, apelar a tu sentido de la
responsabilidad, a pesar de no sentir ilusión por alguna de ellas. Una vez realizadas,
volverás a recuperar la ilusión con las tareas que si te gustan.
Si no te esfuerzas por hacerlo y esperas a que
vuelva la ilusión, acabaras por hacer muy poco o nada entrando en la espiral de
la desmotivación.
Tenaz
y perseverante
Dejar de luchar cuando no te sale bien o
encuentras obstáculos es muy
desmotivante. Es cierto que tiendes a desanimarte cuando algo no sale como esperabas. Si
desistes ante el obstáculo, entras en un bucle de desmotivación que te lleva a
poner menos ganas y lógicamente a tener menos posibilidades de conseguir tu
objetivo.
La determinación es la mejor forma de activar
tu motivación.
Así pues cuando estés desmotivado porque algo no
sale como esperabas, la mejor manera de volver a motivarte es esforzarte por conseguirlo. Evita el desánimo,
crécete ante los problemas, es en esos momentos cuando tienes que dar lo mejor
de ti. Asume y cumple el compromiso de resolverlo. No des un paso atrás: Se
perseverante y tenaz y tu motivación se activará.
Conclusión
Muchas pueden ser las causas de desmotivación en el
trabajo. Cualquiera de ellas que consiga desmotivarte, va a conseguir en
paralelo que tu eficacia profesional se vea reducida. Si quieres ser eficaz
tendrás que estar motivado.
La motivación depende solo de ti.
No depende de las circunstancias ni de los demás,
aunque no siempre te lo pongan fácil. Eres tú, siempre tú en última instancia
quien decide si quiere estar motivado o
no. Ambas elecciones son respetables.
Mi recomendación personal es que lo valores con la
información y las herramientas que he puesto a tu disposición con este articulo
y actúes en consecuencia. Lograr la automotivación no tiene por qué ser fácil,
pero las ventajas que vas a conseguir en términos de eficacia y bienestar
personal te van a compensar holgadamente.
¡Muchas Gracias por tus diez
minutos!
Benicio Orozco
No te pierdas el
próximo post.
La frase
“Puedo aceptar un fallo,
cualquiera puede fallar, pero no puedo
aceptar el no intentarlo”
Michael Jordan, exjugador de
baloncesto estadounidense. Propietario del equipo de la NBA los Charlotte
Hornets.
Reflexión
“Hoy será un gran día si yo quiero que lo sea”
¿Alguna vez
has vivido el proceso de desmotivación descrito arriba?
¿Hasta qué
fase del proceso?
Es tu turno:
Cuéntanos como lo superaste o cualquier otra aportación, sin duda será
interesante. Escríbelo abajo en comentarios.
¡¡ Muchas Gracias !!
LECTURA ADICIONAL RECOMENDADA: Mejora tu
eficacia_2.html
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te gustó este post INSCRIBETE SIN
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compromiso. Introduce tu email. Gracias
Fuentes: Anécdota de La
ranita sorda extraída del libro “La culpa es de la Vaca” de Jaime Lopera
Gutierrez y Marta Inés Bernal Trujillo
“Los siete
hábitos de la gente altamente efectiva”.
Stephen Covey
“Organízate con eficacia” David Allen
“Motivación o Automotivación” Miguel Angel Velázquez Martín .
Director del centro de investigación en valores http://mavelazquez.blogspot.com.es/
“Las ocho claves del liderazgo del monje que vendió su
Ferrari” Robin S. Sharma
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